Cuando uno se propone mantenerse al día con sus asuntos, la actitud de dejar cerrados los temas pendientes juega un rol de privilegio dentro de nuestro arsenal. El principal beneficio de ésta postura mental es la de motorizar la acción hacia un estado de ejecución tal que nos permite liberar constantemente tiempo para ocuparnos tanto de nuestras verdaderas prioridades como de los nuevos temas que surgen a diario con la tranquilidad de no arrastrar cosas que debiendo estar hechas, al no estarlo se sumen innecesariamente a nuestra carga de trabajo en un momento inoportuno. ¿Hábito o Actitud? Para ser honesto, no sabía si convenía ubicar éste artículo en la categoría de Hábitos o la de Actitud . Porque tiene un poco de ambas. Pero luego de un rato de meditarlo, decidí que tenía más sentido en el área actitudinal en la medida que es un elemento motivador más que una costumbre. Sin pretender ser extremadamente riguroso, permítanme tomar ésta decisión al respecto, y com
Organización y Productividad Personal